30 May Qué ver en Cartagena de Indias, el Caribe Colombiano
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Una semana en el Caribe Colombiano.
Hay viajes que planeas con un mucho tiempo, que te apetecen, que sabes que estarán bien… Y hay otros que tienes guardados en la retina desde hace años. Eso me pasaba a mí con Cartagena de Indias, el Caribe Colombiano.
Viajar es volverse mundano
es conocer otra gente
es volver a empezar.
Empezar extendiendo la mano,
aprendiendo del fuerte,
es sentir soledad.Gabriel García Márquez
Desde que vi enterita la serie Betty la Fea, la original y genuina, la colombiana; me enamoré de aquel paraíso. Recuerdo que Betty viajaba por trabajo a Cartagena de Indias y después de mucho penar y con el Caribe Colombiano de fondo se volvía guapa. Y ver esas playas caribeñas, esos rincones, esas calles fue un descubrimiento. Pensé esto tengo que verlo yo. Y al fin el año pasado pude hacerlo realidad y cumplí mi sueño de viajar a Cartagena de Indias.
David como en muchos destinos latinoamericanos ya había estado un par de veces, así que fue nuestro guía por allí. Esta vez fue un viaje al Caribe colombiano con amigos, no en familia y fue súper relajado y disfrutón.
Primeros días en la ciudad de Gabo
El primer día, caminamos desde nuestro hotel en Bocagrande hacia el centro histórico, fuimos junto a la costa para poder divisar el skyline cartagenero.
En el trayecto encontramos pescadores, garzas y casetas de los vigilantes de la playa cartagenera.
Cartagena de Indias, ciudad Colonial
Tras unos 30 minutos llegamos por primera vez al centro histórico, para descubrir una de las ciudades coloniales mejor conservadas de Latinoamérica.
Finalmente, llegas hacia el centro colonial. Lo primero que encuentras es el Muelle de los Pegasos, en el que dos imponentes estatuas de inspiración griega te dan la bienvenida. Junto al muelle se encuentra el Camellón de los Mártires, un homenaje que recuerda el fusilamiento de varias personas que no tuvieron la posibilidad de tener un juicio justo.
Entrando en la Muralla
A la izquierda te adentras por la Puerta del Reloj, donde retrocedes en el tiempo. Los edificios con sus preciosos balcones, carros de caballo, fachadas de colores, mujeres y hombres con su ritmo tan particular. Es algo que no se puede describir. Una verdadera joya.
Si quieres hacer alguna excursión o alquilar un coche de caballos, una chiva rumbera, la Plaza del Reloj es tu lugar. Allí todos te ofrecen sus excursiones y tienes que negociar bien si quieres hacer alguna.
Aunque nosotros sin duda te recomendamos organizarlo aquí.
El Famoso portal de los dulces
En los soportales de la Plaza de los coches se encuentra el famoso Portal de los Dulces. Un paraíso para los golosos, donde hay multitud de puestos llenos de cocadas, chocolates, bizcochos típicos de Cartagena, chucherías, caramelos, paletas… Un icono de la ciudad.
Caminando hacia la izquierda está el edificio la Aduana y la plaza del mismo nombre y si continúas llegas a mi plaza favorita. La Plaza de San Pedro Claver. Perfectamente conservada impresiona nada más verla.
Esos tres primeros días aprovechamos para no perdernos nada de la ciudad.
Nuestros imprescindibles dentro de la muralla:
- La Plaza de Santo Domingo, donde fotografiarte con la famosa escultura de Botero. En la plaza hay un edificio reconstruido por nuestra AECID. No os perdáis dentro el Claustro de Santo Domingo.
- Pasear por la Plaza de Bolívar para ver el ritmo de la gente. Visitamos el Museo Histórico; es un edificio de arquitectura colonial con un claustro curioso.
- Visitar el claustro de la Merced de la Universidad de Cartagena, donde descansan los restos de Gabo. Tuvimos la suerte de tener una guía particular que nos enseñó el claustro universitario y nos habló sobre la vida de Gabriel García Márquez en Cartagena.
- Recorrer su muralla y ver a sus palenqueras, que llenan aún más de color la ciudad.
- Tomar un cóctel en el Café del Mar, viendo la puesta de sol, es un must. Se encuentra en el Baluarte de Santo Domingo.
Por tanto, lo mejor es perderse por sus calles sin rumbo, para disfrutar de sus balcones, sus puertas y fachadas de colores.
Visita a la Playa de las Américas
Al día siguiente, madrugamos para irnos a la playa junto al Hotel de las Américas.
El sol en Cartagena es de justicia y hay que protegerse mucho.
Nuestro día de playa fue muy divertido, alquilamos una sombra para protegernos y nos preparamos para pasar un día diciendo que «no» a cada vendedor que pasaba por allí. La verdad es que a pesar de todo nos reimos muchísimo, porque no os podéis imaginar la cantidad de gente que quiso vendernos algo y todo lo que vendían, cualquier cosa que podáis imaginar la tenían. Muy curioso.
Aunque no es la típica playa caribeña, no está mal para disfrutar del mar y ver la vida local.
Comimos en un chiringuito cerca de la playa, muy de ellos así que fue rico y barato.
Pasamos la tarde en la piscina del hotel y después salimos a cenar al centro. Esa tarde quisimos contratar una Chiva Rumbera para el día siguiente, pero cambiamos de idea y decidimos coger un coche de caballos que nos paseara por el centro de la ciudad.
El tercer día lo dedicamos a visitar el Convento de la Popa y el Castillo de San Felipe de Barajas.
Visitas fuera de la muralla
Convento de la Popa
El tercer día y bajo un sol de justicia. Tomamos un taxi para ir al Convento de la Popa, al Castillo y la Fortificación.
En primer lugar, subimos al Convento. Merece mucho la pena su claustro, uno de los más bonitos de la ciudad. Allí se encuentra la capilla de Nuestra Señora de La Candelaria, patrona Cartagena.
Está enmarcado en un lugar precioso y desde el convento hay unas magníficas vistas a la ciudad de Cartagena de Indias y al Caribe colombiano.
El taxi nos esperó para ir al Castillo de San Felipe de Barajas. Nos dejó en la Escultura a los zapatos viejos.
Castillo de San Felipe
El castillo está bien conservado y es una visita en la que descubres la historia de la ciudad y su resistencia a la invasión inglesa.
Fue Blas de Lezo quien consiguió resistir al asedio británico, que daba por ganada la batalla. Según explican en el Castillo, fue la figura clave que hizo que en Latinoamérica se siga hablando español. Merece mucho la pena su visita y conocer la historia. Ahí entiendes por qué a Cartagena se le conoce como la Heroica.
Esa tarde visitamos la Universidad de Cartagena, conociendo el lugar donde descansan los restos del Nobel de Literatura Gabriel García Márquez.
«La vida es la cosa mejor que se ha inventado»
Gabriel García Márquez
Una tarde en el Barrio de Getsemaní.
Visitar el barrio de Getsemaní es imprescindible. Os recomendamos ir por la tarde, cuando cae el sol. La plaza de la Santísima Trinidad se llena de vida, gente sentada alrededor de la iglesia, tomando un trago, cantando, niños jugando. Un lugar mágico caribeño y acogedor.
Hay muchos sitios para cenar y pasear por sus calles de noche viendo la vida local. Es de lo más auténtico. Las puertas abiertas, la gente sentada en las calles, los niños jugando.
En resumen, estuvimos 4 días completos. Después tomamos un barco para llegar a un lugar paradisiaco: Isla Mucura. Allí sí que disfrutamos de Cartagena de Indias y su Caribe Colombiano. ¡Os contamos en breve!
Y el último día lo pasamos de nuevo en Cartagena. Nos dimos un homenaje y dormimos en el Hotel Sofitel Legend Santa Clara. Un hotel precioso, con historia, una piscina que es una maravilla y un desayuno de escándalo. En el comedor del desayuno hay una palenquera que te cortaba la fruta y era una delicia.
Datos prácticos
Vuelos
Volamos con Iberia a Bogotá y desde allí con Avianca a Cartagena. Los vuelos fueron relativamente cómodos. Sin embargo, con Avianca tuvimos algo de espera sobre todo a la ida, porque no había tripulación para el tipo de avión que teníamos.
Alojamientos
Los primeros días nos alojamos en un hotel funcional a las afueras, en la zona residencial y empresarial, a media hora andando del centro colonial. Holiday Inn Bocagrande
El último día nos alojamos en el Hotel Sofitel Legend Santa Clara. Situado dentro de la muralla y perfecto para pasar unos días de relax y tranquilidad.
Dónde comer :
- Restaurante Blas el Teso (playa de las Américas)
- La Mulata (Dentro de la muralla, perfecto para comer, informal)
- Juan del Mar Restaurante (Dentro de la muralla, perfecto para cenar, local con encanto y música en directo)
- La casa del Socorro (Dentro de la muralla, perfecto para comer, informal)
- La Bruschetta (Dentro de la muralla, cocina italiana, informal)
- Restaurante Bar la Vitrola (Dentro de la muralla, local con solera, perfecto para cenar)
Precio de entrada Castillo:
Castillo de San Felipe de Barajas
Entrada para adultos $ 7.000 pesos colombianos
Descuento para niños menores de 12 años y estudiantes. Es necesario presentar el Carné $ 4.000
Compras
Si queréis hacer compras no dudéis en ir a la Plaza de las Bóvedas. Nosotros dedicamos una tarde a entrar en sus tiendas. Además si os gustan los sombreros y los bolsos de hilo colombiano que tanto se han puesto de moda, id allí, porque no encontraréis oferta y precios mejores. Además suelen regatear (siempre que os guste, claro)
Las bóvedas eran antiguas mazmorras y son como 30 tiendas seguidas en las que encontraréis todo tipo de souvenirs.
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Patricia
Posted at 18:44h, 31 mayoMe encanta
Disfrutando del Viaje
Posted at 20:07h, 31 mayoGracias ¡Es un paraíso!
Beatriz
Posted at 09:06h, 01 junio